martes, 25 de marzo de 2014

Cifuentes anuncia que se expedientará a los organizadores del 22M


La delegada del Gobierno en Madrid, Cristina Cifuentes, ha confirmado que abrirá expedientes sancionadores contra los organizadores de las Marchas de la Dignidad celebradas el pasado sábado. Cifuentes piensa que deberían haber sido muchos más los enviados a prisión porque está convencida de que hubieron radicales que intentaron matar a policías. Asimismo, ha mostrado su satisfacción después de conocerse de que el Ministerio del Interior haya abierto una investigación interna.

La delegada del Gobierno en Madrid, Cristina Cifuentes.

La delegada del Gobierno en Madrid, Cristina Cifuentes, ha anunciado la apertura deexpedientes sancionadores contra organizadores de la Marchas de la Dignidad del sábado pasado, en las que ha dicho que hubo radicales que intentaron matar a policías.
Cristina Cifuentes ha lamentado que solo uno de los veintiún detenidos el sábado haya sido enviado a prisión por la autoridad judicial a pesar de que algunos tienen antecedentes por hechos similares. Además, ha indicado que el detenido que ha ingresado en prisión y está únicamente acusado de lesiones, aunque espera que finalmente pueda ser condenado por intento de homicidio de un policía.
Cristina Cifuentes ha calificado de "espeluznantes" los incidentes del sábado en Madrid y ha asegurado que nunca vio nada semejante ni un ataque con tanta brutalidad.Ha apostillado que los violentos "fueron contra la Policía con saña", hasta el punto de que casi mataron a un agente a patadas en la cabeza, mientras que otros también resultaron con heridas de todo tipo.
Según la delegada, los violentos rompieron marquesinas y otros objetos del mobiliario urbano que arrojaron a los policías, lanzaron petardos e iban pertrechados con palos con cuchillas en un borde, a modo de arma.
Respecto a las críticas de los sindicatos policiales sobre posibles fallos en el dispositivo, ha comentado que hay que aprender para que estas situaciones no se repitan y ha mostrado su satisfacción por que el Ministerio del Interior haya abierto una investigación interna.
En este sentido, ha comentado que quizá haya que hacer un replanteamiento de los operativos, habida cuenta de que las actuaciones de estos radicales está cambiando."Hasta ahora los violentos esperaban a que la manifestación acabara" pero en esta ocasión no lo hicieron y atacaron poniendo incluso en riesgo a niños y personas mayores.
Respecto a las denuncias sindicales, Cifuentes ha insistido en que no se ordenó a la Policía que no usara material antidisturbios y ha dicho que, de hecho, se contabilizaron 169 pelotas de goma lanzadas por los agentes y que, como siempre, se indicó que su utilización fuera proporcional a la gravedad de la situación.
Cifuentes ha lamentado que mientras se estaban produciendo los incidentes algunos intervinientes en el acto central de la manifestación "decían cosas que no eran tranquilizadoras incluso contra la Policía", que se podrían entender que incitaban contra ellos.
La delegada del Gobierno ha explicado que hará uso de mecanismos que proporciona la ley y que va a abrir expedientes contra organizadores, en concreto de la marcha de Madrid y de las "columnas" que pasaron por las localidades madrileñas de Arganda y Perales de Tajuña, que pueden desembocar en sanciones económicas, para lo cual ha pedido informes a la Abogacía del Estado.

lunes, 24 de marzo de 2014

Legalizar el Partido Comunista, la maniobra más arriesgada de Adolfo Suárez


El presidente prepara el terreno para unas elecciones democráticas pero sabe que para lograrlo todos los partidos deben estar representados. Por ello, Adolfo Suárez pone en marcha su maniobra más arriesgada: El Partido Comunista se legaliza.

La legalidad del Partido Comunista, la maniobra más arriesgada de Adolfo Suárez

A bordo de un Dodge Dart negro con bandera franquista viaja Adolfo Suárez. Es julio de 1976 y acaba de ser ungido por el rey Juan Carlos como presidente del Gobierno. Tiene el poder teórico pero se mueve entre dos mundos enfrentados.
Por un lado, el bunker. Le ven demasiado joven pero confían en que no les traicione. Por otro lado, la sociedad española, a quien un falangista de presidente le sabe a lo de siempre. Con el tiempo, todos comprenderán sus errores de apreciación.
Torcuato Fernández de Miranda anuncia el debate de la primera gran apuesta de Suárez: La Ley de la Reforma política. En el estrado, Blas Piñar se enciende al dictado de su mano. El voto es nominal, público y en pie.
El resultado de la votación más importante en España desde 1939 se lee en un castellano que aún distingue la pronunciación de la B y la V. Apoyo mayoritario de las cortes franquistas para una ley clave para el desmontaje de la dictadura. Algunos aplauden porque creen que seguirán mandando. Suárez prefiere cerrar los ojos. Es su primera gran victoria.
Un mes después la tele anima a votar en referéndum esa Ley de la Reforma Política. A Suárez le secan el sudor antes de su discurso pidiendo el sí. Tres de cada cuatro españoles vota sí en urnas de madera. En la calle, los GRAPO secuestran, ETA asesina, y la extrema derecha asesina. Pese a todo, España sigue avanzando.
Las cortes aprueban una ley que permite que si te llamas Joan, en el registro civil ponga Joan y no Juan. El presidente prepara el terreno para unas elecciones democráticas pero sabe que para lograrlo todos los partidos deben estar representados.
La España de peineta y mantilla mira embelesada procesiones del viernes santo como esta de Baeza, grabada en ‘Super 8’. Al día siguiente, Suárez pone en marcha sumaniobra más arriesgada: El Partido Comunista se legaliza.
Como la voz del locutor, los españoles tiemblan ante la noticia. La ultra derecha señala a Suárez como traidor. El ministro de la Marina dimite. El Ejército hierve. Pero Suárez cuenta a su lado con el hombre encargado de apaciguar a los mandos militares: el teniente general Gutiérrez Mellado.
La sexta

Obama, sobre Suárez: "Ayudó a España a convertirse en la nación que es hoy"

La Casa Blanca expresó su "pesar" por la muerte del expresidente Adolfo Suárez, a quien consideró "fundamental" para la transición de España y destacó su labor para convertir al país en "un ejemplo para otros que luchan por encontrar su camino hacia una sociedad más libre y abierta". Suárez fue el primer jefe del Gobierno de España en ser recibido oficialmente en la Casa Blanca por el presidente Jimmy Carter, en 1977.

El presidente de Estados Unidos Barack Obama.

La Casa Blanca expresó su "pesar" por la muerte del expresidente del Gobierno Adolfo Suárez, a quien consideró "fundamental" para la transición de España y destacó su labor para convertir al país en "un ejemplo para otros que luchan por encontrar su camino hacia una sociedad más libre y abierta".
"Como el primer presidente elegido tras la restauración de la democracia (...) ayudó a España a convertirse en la nación que es hoy: líder en la comunidad internacional y un ejemplo para otros países que luchan para encontrar su camino hacia una sociedad más libre y abierta", afirmó Caitlin Hayden, portavoz del Consejo de Seguridad de la Casa Blanca, en un breve comunicado.
Asimismo, subrayó el papel de Suárez por abrir España a "la economía de libre mercado, el sistema de Gobierno parlamentario y el Estado de derecho". Por todo ello, Hayden agregó que, "en nombre del pueblo estadounidense, queremos extender nuestras condolencias a su familia y al pueblo español".

Suárez fue el primer jefe del Gobierno de España en ser recibido oficialmente en la Casa Blanca por el presidente Jimmy Carter, en 1977.
La sexta